En mi las palabras se han hecho silencios
Quietud las ideas, sosiego el afán
Cual esos remansos, parduscos y quietos
Que al sol calciciente, secándose van
Mis sueños lo mismo… cual rubias monedas
Se han ido gastando, de tanto rodar.
En mi alma rebotan, halagos y penas…
Ni logran tocarme, ni me hacen llorar.
***
Un bellísimo poema que solía recitarme mi padre Francisco Choriego a quien amo con todo mi corazón. Esta noche, pensando en él y leyendo estas líneas, comprendo su significado. En mi hoy… sus palabras se han vuelto silencio… más su presencia día a día… está en mi.
Te amo papi.
Laura Choriego | Septiembre 23, 2016